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Sant Antoni Abat |
Sant Antoni vivió en el bajo Egipto durante la segunda mitad
del siglo III. Aunque fuera heredero de una gran fortuna, optó por seguir el
Evangelio y dar todos sus bienes a los pobres. Así fue como optó por una vida
de penitencia en la soledad del desierto donde, según la tradición popular, el
demonio lo tentaba constantemente sin éxito. El día de su muerte, el 17 de enero
del año 356, dos leones se acercaron a él y, lamentándose por la muerte del
Santo, la cavaron la tumba con sus garras. Mientras los leones besaban las manos
de Sant Antoni, este les bendecía.
Sant Antoni Abat es reconocido como patrón protector de los animales, especialmente
del ganado. La fiesta de este santo parece que puede ser la cristianización de
antiguas ceremonias y de cultos primitivos dedicados a divinidades pastorales
protectoras del ganado, posiblemente porcino y puede ser también de “peu rodó” (mulas). Algunos autores
relacionan esta fiesta del ganado de “peu
rodó” con las fiestas habituales romanas. En la antigua Roma, el 8 de enero
era la fiesta de la coronación de los burros ante el altar de Júpiter.
Los antonianos en Palma