Comenzaremos nuestra ruta delante del Ayuntamiento de Valldemossa, situado en los jardines de La Cartuja. Desde la parte nord-este de estos jardines, subiremos unas escaleras que nos separan de la plaza de la Cartuja donde encontraremos las taquillas para adquirir los tickets a la Cartuja (en la próxima entrada al blog detallaré las dependencias de la misma). Terminaremos nuestra visita a la Cartuja saliendo por el Palacio del Rey Sancho.
Una vez en el exterior, en lugar de avanzar hacia la plaza de Ramón Llull, en dirección norte, giraremos hacia la derecha, donode iremos por un callejón un poco irregular que, después de una vuelta a la izquierda y otra a la derecha, bajaremos por una rampa empedrada y escalonada que desemboca en el final de la calle Jovellanos, desde donde continuaremos, pasando por la antigua entrada a la Cartuja, hacia la "miranda des Lledoners", un bonito mirador desde donde tendremos una bonita vista de la parroquia de Sant Bartomeu.
Dejamos atrás el Palacio del Rey Sancho y volveremos por la calle Jovellanos desde dónde llegaremos a la plaza de Ramón Llull, desde donde, hacia nuestra derecha, avanzaremos hacia el núcleo más antiguo del pueblo, por la calle Uetam.
Más adelante, enlazamos con la calle de la Rosa y continuamos en ligera bajada dejando a nuestra izquierda las calles del Pare Francesc Frau y de la Plaza. En el chaflán que esta calle forma con la de la Rosa, nos encontraremos con una roca grabada con una inscripción relativa a la subida de Valldemossa del cuerpo incorrupto de Santa Catalina Tomás (patrona del pueblo), en el año 1974.
La calle de la Rosa nos deja en la calle de la Constitución desde dónde llegaremos a la plaza de Santa Catalina Tomás, dónde también encontraremos la iglesia parroquial de Sant Bartomeu.
Al lado del portal lateral de la parroquia, a la izquierda si miramos la fachada, se encuentra la Rectoria, situada precisamente al principio de la calle que lleva esta nombre. Delante de esta, hay una escultura de bronce de la Beateta, del autor Horacio de Eguía. la imagen está envuelta por un conjunto de especies vegetales, como helechos o cañas de bambú.
A escasos metros de la Rectoria encontramos la casa natal de Santa catalina Tomás, nacida el 01 de mayo del año 1531. Desde muy temprana edad llevó una vida ascética y mística y promovió la vivencia de la religiosidad interior, según la espiritualidad agustiniana; tuvo el don del consejo y de la profecía. Murió en el año 1574 y fue beatificada por el papa Pio VI en el año 1792. Fue también en este año cuando por iniciativa de Jeroni de Berard, parte de la casa se convirtió en oratorio. Su cuerpo incorrupto descansa en la iglesia del convento de Santa Magdalena, en Palma.
Continuamos nuestro paseo por la misma calle de la Rectoria y, al final de esta, giramos a la derecha en dirección a la calle Pare Castanyeda. Al final esta calle gira hacia la derecha donde encontraremos la cruz de madera del Via Crucis. Desde aquí, nos dirigiremos de nuevo hacia la calle de la Constitución para volver al centro del pueblo.
Una vez hemos llegado a la calle de la Constitución, giraremos a la derecha tomando la calle Carnisseria, donde inmediatamente giraremos a la izquierda por la plaza Gallard, que comunica con la plaza del nucleo antiguo, La Plaza Pública. Antiguamente esta plaza acogía el mercado y la posada de los ermitaños de Trinidad.
Hacia ponente, dejamos a la derecha la calle del Pare Francesc Frau y enlazamos con la calle de la Rosa, que cogemos por la derecha. En el próximo cruce dejamos a la izquierda la calle Uetam para llegar nº 30 de la calla de la Rosa, el Convento de Monjas Franciscanas. A pocos metros, justo en la esquina, encontraremos la casa llamada Cal Sabater Coix, en el nº 1.
Si subimos por el carrer Vell llegaremos a enlazar con la calle del Rey Sancho, que discurre transversalmente. Una vez nos encontremos en la intersección, giraremos a nuestra izquierda y bajaremos la calle hasta toparnos con con la Creu de Dalt o de l´Abeurador. Ya desde aquí, bajaremos la calle hasta llegar a la plaza de Ramón Llull.
Finalmente, podremos concluir nuestra ruta descansando en alguna de las terracitas cafeterías que se encuentran en la Via Blanquerna, y degustar una buena coca de patata típica de valldemossa acompañada de un café, un tazón de chocolate o un estupendo granizado de almendra.
Mapa turístico:
Enlaces a las guías: en la lista de enlaces de este blog podreis encontrar un acceso a la página web del Ayuntamiento de Valldemossa con las guías turísticas en diferentes idiomas y el mapa.
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