Los molinos de Es Jonquet son uno de los conjuntos molineros más
interesantes del municipio de Palma. Estos se encuentran situados sobre el
acantilado que domina el puerto frente al mar, formando la imagen más
representativa de la fachada de la ciudad.
Estos molinos son considerados como monumentos de la
arquitectura popular de nuestra isla, al ser restos de una actividad industrial
para la molienda del grano.
Como ya es sabido, estos han estado expuestos a su
total desaparición al haberse proyectado una urbanización en la barriada de Es
Jonquet con el consecuente derribo de los molinos. En la actualidad quedan
todavía cinco, y dos que han desaparecido por diversas circunstancias.
A finales del siglo XIV y XV se empieza a encontrar
documentación referente a estos molinos de viento, sabiendo que en el año 1.406
ya existía uno de ellos, pero in poder precisar cuál sería de los siete que
llegaron a existir.
Desde esta época hasta el siglo XX son muchos los
nombres que se han podido documentar para nombrar a estos molinos, pues existía
la costumbre de que al cambiar de propietario se pusiera el nombre del mismo.
La construcción de los molinos de Es Jonquet l podemos clasificar
dentro del grupo arquitectónico de molinos con base, ya que todos tenían
construcción alrededor de la torre. Las torres de construcción cilíndrica tiene
aproximadamente 8 metros de alto, 4 metros de diámetro y los muros tienen un
grosor de 90 cm. El acceso a los mismos es por la puerta situada en los bajos y
en la parte de la terraza. La escalera de caracol cruza unos pisos intermedios
para llegar al piso superior que albergan toda la maquinaria con unos
ventanucos para la iluminación y poder comprobar la dirección del viento, ya
que el giro de la maquinaria para su orientación al viente se ejecuta desde el
interior con unas palancas. Su cubierta es de forma cónica.
Las bases de los molinos de Es Jonquet presentan
grandes diferencias entre ellos en cuanto a su distribución, quizás sea por la
fecha de construcción o bien por los
intereses y deseos de sus constructores.
El nombre de estos molinos son Molí den Garlera (restaurado y convertido en museo de los molinos),
Molí del Nom de Déu (ya ha sido
restaurado y dedicado a fines culturales), Molí
den Toni Trossos (desparecido), Molí
den Carreres, Molí de Sa Garriguera,
Molí den Celos y Molí den Moll (derribado en 1975 por presentar peligro y ser declarado en
ruina por el Ayuntamiento). Los otros 3
molinos de propiedad particular han sido dedicados a discotecas y locales
nocturnos de ocio.
Fotografía: Virginia Leal